jueves, 17 de julio de 2014
mi envidia,viajar,,,los viajees
ABTOUR Viajes
2 h ·
Incansables, soñadores y un poco excéntricos, los grandes viajeros inspiran a todo aquél que ha soñado con dar la vuelta al mundo. Algunos de ellos han hecho de sus viajes una forma de vida; gracias a libros, ilustraciones, documentales o fundaciones exclusivamente dedicadas al arte de viajar. Repasamos algunos de los viajeros más influyentes de la actualidad, incluyendo los que han visitado más países y los que generan más controversia. Algo así como los Marco Polo contemporáneos.
1. BOB CAREY, VIAJES POR AMOR
Poca gente es tan entrañable como este hombre vestido con un tutú rosa. Pasea por el mundo fotografiándose desnudo en todo tipo de lugares y paisajes, pasando frío y siempre descalzo para la foto. Su nombre es Bob Carey y tiene un buen motivo para hacerlo: cuando su mujer Linda fue diagnosticada con cáncer de pecho, decidió hacerla sonreír haciéndose fotos por Nueva York en tutú. La cosa tuvo éxito: la pareja fundó ‘The Tutu Project’ y sigue recaudando fondos para mujeres enfermas.
2. ANDRÉ BRUGIROUX, EL TROTAMUNDOS POR EXCELENCIA
Una lista de viajeros empedernidos no puede olvidar al “viajero más importante del siglo XX”; André Brugiroux. Su viaje por todo el mundo duró, ni más de menos, que 50 años de recorrido en autoestop. Así, como si nada. La tesis de la experiencia de este parisino de nacimiento es clara: la Tierra es un solo país, y todos formamos parte de lo mismo. Visitante de todas las fronteras y acérrimo defensor del behaísmo, hay un documental que explica su experiencia.
3. LAURA DEKKER: EL MUNDO DESDE EL BARCO
Los grandes viajeros empiezan jóvenes. Pero lo de esta chica de Nueva Zelanda es un poco exagerado. Con 14 años tomó la decisión de dar la vuelta al mundo en barco, y se convirtió en la persona más joven en completar ese reto. Un año antes ya había ido sola desde Inglaterra hasta Holanda, saltándose permisos legales que prohíben a un menor de edad ir solo en barco. Hoy en día sigue viajando incansablemente desde el Guppy –una embarcación que lleva paneles solares-, inspirando a todos los amantes del mar a partir hacia la aventura.
4. MICHAEL GLAWOGGER, EL VIAJE A LO INVISIBLE
Lo suyo no es un viaje agradable, sino más bien una entrada a los submundos que nadie quiere ver. Con una dirección artística impecable –gracias al uso de cámaras analógicas- este aventurero denunciaba los trabajos más inhumanos que existen, viajando incansablemente por todo el mundo con ojos de documental. Fallecido recientemente, el legado de este cineasta queda para todos en largometrajes imprescindibles como Workingman's Death.
5. RON FRICKE, UN MUNDO DE COLOR
En la misma línea de Glawogger, encontramos al cineasta americano Ron Fricke. Lo suyo es pura observación antropológica. Con una cámara de 70mm diseñada por él mismo, se adentra en cualquier lugar y rincón del planeta con los ojos de un niño observador. Su curiosidad no tiene límites: desde sistemas de producción agrícola hasta supermercados asiáticos, absolutamente todo lo que pasa en el mundo puede convertirse en una experiencia interesante. ¿Sus películas indispensables? Baraka y Samsara.
6. JORGE SÁNCHEZ: ENCONTRARSE A UNO MISMO
En España contamos también con una de las personas más viajadas del mundo. Es Jorge Sánchez, que empezó a visitar lugares a los trece años y sigue en su particular vuelta constante al mundo. Dice que conoce absolutamente todos los países, y suma 30 años en viajes por todo el mundo. Tiene claro que los viajes se pagan trabajando en los lugares que visitamos, y diferencia entre “viajante” y “viajero”. Su perdición son los mapamundi y los atlas, y su salvación la gente que conoce por el camino.
7. DAVID MACAULAY: EL ARTE DE PINTAR
Ilustra a la perfección el asombro del viajero ante plazas escondidas, escaleras infinitas y edificios antiguos. En su libreta de viaje se esconden algunos de los escenarios más turísticos y encantadores de las ciudades europeas, con trazos que nos transportan a una Roma tranquila o un Egipto faraónico, pasando por la construcción de una ciudad medieval o de la catedral de Notre Dame. Una manera fresca y original de interpretar los edificios y los paisajes que encontramos viajando.
8. ROBIN ESROCK: SONREÍR PARA CONOCER
“Sólo me arrepiento de no haber viajado más”. Esta es la frase que, según Robin Esrock, ha escuchado más veces entre gente mayor. Este canadiense que decidió ir a recorrer el mundo después de sufrir un accidente en moto, se ha convertido en un autor de éxito. Convencido de que las narraciones de viaje aportan un tono positivo que no encontramos en las noticias –a diferencia de ellas, nos dan datos positivos de cualquier país- recomienda un destino por encima de todos: Albania y su gente.
9. ROLF POTTS: LA SORPRESA COMO META
Se ha hecho famoso por viajar sin equipaje e inventar el término “vagabonding”. Para este periodista incansable, sólo hace falta tener un pantalón con muchos bolsillos y ganas de descubrir lugares nuevos. Los viajes son tan adictivos, según Potts, porque nunca te encuentras con aquello que habías pensado– y eso te permite experimentar un tipo de libertad que no puedes conocer desde casa. El vagabonding es precisamente eso; el arte del largo recorrido.
10. HEINZ STÜCKE: TRAYECTO SOSTENIBLE
Muchos viajeros tienen algo en común: prefieren evitar los aviones. Poco sostenibles y demasiado rápidos, eliminan buena parte de la magia de llegar hasta el destino. Stücke es famoso por llevar esta obsesión hasta el extremo, y decidir recorrer el máximo de países posibles en bicicleta. Alemán de nacimiento, se le considera el segundo viajero más activo del mundo –después de André Brugiroux- y se le conoce como “el hombre que lo quería ver todo”. Y, sin duda, lo está consiguiendo.
11. JINNA YANG: ENTRE EL AMOR Y EL PHOTOSHOP
Lo de Jinna Yang es pura controversia. Algunos lo ven como un acto conmovedor lleno de amor –se dedica a llevar una copia de cartón a tamaño real de su padre fallecido por todo el mundo, para fotografiarse en los lugares que él nunca pudo visitar-, y otros lo ven como un auténtico fake. Parece ser que la artista utiliza más photoshop del que debería, ya que el cartón en cuestión no paraba de mojarse y estropearse ahí donde iba. La idea, no obstante, nos permite recorrer mundo de una forma original.
Ver nota completa en: http://bit.ly/1oXZ1MV
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